Para nosotras, la creatividad se puede aplicar en todo; nuestra inquietud va más allá del horizonte de nuestras pantallas, las tres tenemos un mundo artístico latente en nuestro interior con necesidad de aflorar.

 

 

Raquel es una creativa inconformista, a la que le encanta experimentar y estar en constante evolución. Se graduó en diseño y se especializó en interiores. Al terminar sus estudios quiso potenciar su faceta más artística y también se graduó en ilustración; el dibujo es su principal vía de expresión.

 

Hace tan solo 4 años empezó a dedicarse al diseño y estilismo floral, elaborando composiciones a partir de plantas y flores que muchas veces combina con el diseño gráfico y la ilustración.

 

Trabaja para particulares, empresas, instituciones y eventos de todo tipo. Además crea escenografías, aparadores, pop ups comerciales… a la vez que imparte interesantes workshops. Si, a Raquel le va la marcha, y por eso fue una de las elegidas para nuestro «Reto Blanc».

 

Le explicamos nuestro proyecto BE DONE, todo lo que significa a nivel conceptual y que se trata de un proyecto vivo, con el que queremos desarrollar una red de creativos conectados para colaborar y crear. 

 

Raquel recogió todas estas semillas conceptuales para empezar a sembrar. Preparó unos bocetos muy bien detallados con sus ideas y su escenografía.

 

Su concepto se basaba en la experimentación con la naturaleza (viva o muerta) en forma de escultura, utilizando el color y el reciclaje como alegoría del cambio de estado. Como ella misma comentaba «A veces la reinvención nace de la misma decadencia».

 

Básicamente utilizamos plantas y flores naturales, preservadas y secas en nuestros tres colores (magenta, cyan y amarillo) sobre una estructura de madera y espuma que también completamos con telas y unas redes vegetales.

 

Empezamos recogiendo flores naturales en el exterior, un espacio idílico lleno de color, olor y buen rollo que disfrutamos mucho. Una vez recolectadas nuestras flores naturales, empezamos a trabajar con las flores secas. Al estar secas, presentaban tonos marrones y una textura interesante que daba mucho juego para pintar con spray; podíamos jugar con partes del color real y otras pintadas, mancharlas totalmente o darles degradados tonales para así transformarlas.

 

Una vez preparados nuestros elementos básicos, empezó el show; se trataba de crear una composición combinando las flores con las telas vaporosas, las enredaderas, las redes… sobre los tacos de espuma y el marco de madera. La idea era crear zonas de color que fueran degradando de una a otra para fundirse en un único elemento coherente y atractivo visualmente.

 

Una vez terminada la obra, entrábamos nosotras en escena. Hicimos varias pruebas de vestimenta y optamos por una indumentaria en blanco que contrastaba con la composición y la resaltaba. Para integrarnos mejor con la pieza, y así dotarla de carácter y protagonismo, cubrimos nuestras caras con unas coronas de flores que Raquel nos había preparado, cada una en su color.

 

Y todo esto fue captado por el objetivo y el talento de María Ojer, que hizo un extenso reportaje tanto del making of como del resultado. Gracias a ella conseguimos unas imágenes dignas de editorial de revista.

 

En palabras de la misma Raquel… «Las chicas BE DONE captaron rápido la esencia, se desenvolvieron rápido y de forma natural con el material». Eso fue porque nos entusiasmó trabajar con ella, disfrutamos mucho de su talento y de su entorno y eso siempre consigue buenos frutos. 

 

Esta es nuestra última colaboración antes del Festival Blanc, pero seguiremos fluyendo en el universo creativo.